Del latín “solidus” (solidario), la solidaridad es el apoyo o la adhesión a una causa o al interés de otros, generalmente en situaciones difíciles.
- Es una colaboración mutua entre las personas.
- Es compartir con otros tanto lo material como lo sentimental.
- Es ofrecer ayuda a los demás.
- Es sinónimo de apoyo, respaldo, ayuda, protección…
- Suele perseguir una causa justa para cambiar el mundo, haciéndolo mejor, más habitable y más digno.
Pero ante todo es un gran valor o principio del que afortunadamente dispone mucha de la gente que deberíamos de implementa siempre que nos sea posible.
Definiciones de solidaridad desde diferentes marcos
- Solidaridad como valor: al caracterizarse por la colaboración mutua entre los individuos, permite lograr la superación de los más terribles desastres, como guerras, pestes, enfermedades, entre otros, sin olvidar aplicarlo también con nuestros familiares, amigos y/o conocidos que se encuentren en situaciones difíciles.
- Solidaridad como enseñanza: fomentar la solidaridad desde la infancia es muy importante ya que puede ser vista como la base de otros valores humanos.
- Solidaridad desde los Derechos Humanos: los derechos de los pueblos que optimizan el desarrollo de la persona en un ambiente apropiado, contemplan al ser humano en su universalidad y buscan garantías para la humanidad como un todo.
- Solidaridad desde la ley: es un modo de derecho o una obligación “in sólidum” (por entero), es decir que la víctima de un daño puede obtener la reparación total del mismo solicitando la responsabilidad a uno de los coautores.
- Solidaridad en lingüística: es la función entre dos elementos que se implican mutuamente en un texto o están en interdependencia. Por ejemplo, la relación entre los morfemas de número y persona verbales.
- Solidaridad y sociología: en sociología puede ser vista como la adhesión de cada uno de los miembros a unos mismos valores y a unos mismos principios.
La solidaridad promueve la colaboración
Si tenemos un ambiente de trabajo óptimo, y en el equipo que conforma tu entorno, existe colaboración y compañerismo entre sus miembros, entonces podemos decir que dispondremos de un ambiente óptimo para que surja la generosidad y el compromiso. A la vez que también contribuye a un crecimiento personal en cada uno de los compañeros.
La solidaridad es un valor con el que podemos tener relaciones personales, familiares, sociales, que por una causa común nos hacen más fuertes, y así contrarresta la indiferencia y el egoísmo. Ya no es suficiente con tener talento, sino que hay que ser solidario.
En cuando surge y se practica la solidaridad, cada uno puede aprender de los otros, preguntar dudas, y llegar a acuerdos de una manera más fácil y rápida, para lograr los objetivos, cualesquiera que sean. Nos sentiremos útiles e importantes y nos hará ser personas más positivas. Nuestro cerebro percibe la sensación de recompensa y nos genera bienestar, eleva la autoestima y con todo ello una mayor interacción social.
La solidaridad mejora la comunicación
La comunicación efectiva vendrá dada siempre en un ambiente de colaboración y trabajo en equipo, cada persona se siente apoyada por el resto y comparte los proyectos para unos objetivos comunes.
Tener ciertas habilidades o talento para la comunicación son una garantía de éxito y de que se difunda y se perciba la solidaridad entre los miembros del mismo equipo y que se desarrollen ideas y maneras de hacer similares sobre los objetivos marcados.
La solidaridad aporta un sentido de pertenencia
Si en el entorno laboral se comparten valores y principios, es mucho más fácil dar apoyo o ayuda a los compañeros, de este modo se crea un sentimiento de pertenencia y de hermandad. Es muy satisfactorio sentir que se forma parte de un equipo, cuando todos están bajo la misma identidad y comparten los mismos intereses y objetivos, las ganas de hacer un buen trabajo aumentan.
Conocer que podemos contar con unos compañeros ante cualquier problema o dificultad, dará sensación de seguridad en todo lo que se plantee, con una mejor organización y seguro que obtenemos resultados mucho más armónicos.
Ser solidario es una de las mejores cualidades que se puede pedir a los empleados. Si les realzamos que están ayudando a alguien también se estarán ayudando a ellos mismos.
Resumiendo
La solidaridad en el campo laboral ha sido de vital relevancia en la mejora de los derechos de los trabajadores. La conocida frase “la unión hace la fuerza” es parte de nuestras vidas y, en estos tiempos, debería ser un mantra que nos ayude a superar la crisis sanitaria que está dejando en jaque nuestra economía y, por consiguiente, a las empresas. El verdadero éxito de una empresa es tener en su haber a personas con sentido de pertenencia, comprometidas y solidarias.